lunes, 6 de febrero de 2012

Al Final

Guerra; odio; sangre; gritos; llantos; homicidios; secuestros; discriminación; indiferencia; discordia; tristeza; peleas; dictaduras; armas; dolor; suicidios; violaciones; abortos; soledad; discusiones; enemistad; torturas; desapariciones; egoísmo; soberbia; asaltos; corrupción; genocidios; violencia; adicciones; orgullo; golpes; agresión; depresión; impaciencia; desconfianza.

Neumonía; malaria; paludismo; mal de Chagas; locura o demencia; Alzheimer; Parkinson; esquizofrenia; anorexia; hedonismo; cáncer; sida; y un sinfín de enfermedades impronunciables.

Niños con hambre; indigencia; desempleo; divorcios; viudos y viudas; huérfanos; niños llorando bajo una mesa preguntándose cuándo se detendrán los gritos; madres desesperadas al mirar las cuentas que muy difícilmente puedan llegar a pagar; jóvenes con hambre agrediendo a personas que les negaron una moneda; alcoholizados destrozando coches y casas; otros escrachando monumentos; llantas quemadas en medio de la ruta; bosques que no volverán a crecer; pinguinos y muchos otros animales empetrolados y condenados a muerte por algún descuido; embriones irradiados por alguna explosión nuclear de hace muchos años; pobreza económica y peor, de corazón.

Alguien parado en la punta de una escollera, al borde de un puente, o a punto de tirar del gatillo preguntándose si alguien lo extrañará; dos amigos corriendo hacia un alambre de púas mientras granadas y tanques, o el napalm, les vienen encima; injusticia e impunidad; otro accidente de auto que se lleva alguna vida; cascotazos y avalanchas en un estadio; niños de cualquier edad obligados a ver pornografía en todos lados; niñas obligadas a la prostitución.

Traición; tergiversación de acciones y palabras para el propio provecho; egocentrismo; un padre o una madre que proyecta sus sueños y frustraciones sobre su hijo o hija; una mirada prendida fuego en un rostro rojo de ira que no se puede olvidar; falta de respeto; falsedad e hipocresía; envidia y celos extremos; obsesión; anestesia social; falta de identidad cultural; ancianos maltratados en una sala de hospital; personas que jamás llegan al hospital por culpa de la impuntualidad o la negligencia; profesores enseñando a no pensar; privación del derecho a soñar; dos amigos de toda la vida que se dejan de hablar por un malentendido o lavado cerebral; idiotez masiva y desviación de la atención para que algunos hagan lo que quieran con la nación.

Quema de libros, cuadernos, escuelas y personas; explotación indiscriminada de maravillas naturales que tardaron milenios en formarse; ataque a la dignidad humana, en cualquiera de sus horribles formas; falta de compresión; secretos y verdades escondidas; miedo a hablar, abrazar, jugar o reír; personas que buscan erróneamente la felicidad propia hiriendo a los demás o a alguien en particular; tantas cosas más que mi cabeza no puede abarcar o escribir.

Y al final, el Amor es más fuerte.